Por Diego Oddo – 19 de abril, 2020
Hice un amigo epistolar en cuarentena. Él nació en La Pampa y se me ocurrió llamarlo —creo que para su disgusto— mi amigo punkpeano.
A mi amigo punkpeano le pegó bien la cuarentena. Me contó que hacía mucho no escribía ni tenía esa pretensión, pero de pronto empezaron a salirle poemas. Vengo escuchando algo parecido en pacientes que se animaron al Skype. Una chica dijo en sesión: “Me puse a escribí sobre dos ejes: un diario de cuarentena y otro donde analicé por qué algunas heroínas del cine me fascinan tanto”. Agregó: “nunca tuve las uñas tan largas” (se las dejó de comer). Claramente, el segundo ejercicio que ella misma se impuso fue mucho más interesante. Se descubrió a sí misma teniendo fantasías sádicas. No le gustó verse así, pero al menos ya no se come las uñas.
Me desperté ayer a la mañana y quise escribir algo. Yo, Diego, porque soy escritor, me voy a levantar a escribir Algo. Pero al cabo de un rato escribiendo y borrando palabras, buscando algo para decir, me di cuenta —mejor dicho, me acordé— de una verdad: no hace falta escribir, nunca hizo falta escribir, nadie espera que escribas ni le importa lo que tengas para decir, Diego, vamos. A eso ya lo sabías. ¿De golpe te lo olvidaste? ¡Ah! Claro. Como siempre, te equivocaste. Las cartas a tu amigo punkpeano son el único ejercicio genuino de escritura de tu cuarentena. De nuevo, aprendelo de una vez, que te entre en la cabeza: el mejor ejercicio de escritura es el que acontece sin buscarlo. Como enseña el zen: el que simplemente acontece y se manifiesta Mushotoku (sin finalidad, sin meta, sin espíritu de provecho).
“Cuando pase todo esto voy a ver qué hago con aquello” “Después de la cuarentena, cuando todo esto pase, haré tal otra…” “Te escribo después de que pase todo esto y lo seguimos hablando”. Así me encontré pensando y hablando varias veces. Hoy me levanté y miré por la ventana como todas las mañanas. La gente iba de acá para allá con sus barbijos. Pensé en ninjas, en una película futurista. Pensé también: Diego, no hay ni habrá después de la cuarentena. Nunca lo hubo ¿por qué lo habría ahora? Después me tranquilicé. Disfruté mucho el día de hoy. Fue el mejor día de todos.
Músicas para maridar letras
Nuclear war – Sun Ra & His Arkestra
Released on: 2017-08-11
Lyricist: Sun Ra
Composer: Sun Ra
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